martes, 22 de septiembre de 2015

Primero de Invierno


La vida nos encuentra separados, naciendo en tiempos y distancias que repelen la anexión de un gran amor.
Ella es menos, yo he sobrepasado la adultez cerebral por tres años de edad. Mi madurez es la predilección para pasar el impedimento. La voluntad de años traspasados, experiencias necesarias que preparan. Tengo la fe, disposición de dar la vida.
La tengo a ella sin tenerla, la tengo pues es lo que más quiero, y aunque nuestros deseos sean gemelos, no compartimos miedos. Los he perdido, pero otro han nacido, el de no tenerte conmigo.
Perdido pienso, sin tener alternativas de un cambio nuevo. Las expectativas se fosilizan, el tiempo se agota, creo esperar una lluvia de millones de gotas, pero nunca moja, y aquel desierto tan amado como odiado sigue siendo lo que fue, es y sera, no puedo darle vida. No se resucitar a los muertos, solo amar a los despiertos.

Desconozco una felicidad que se prolongue por días, meses o semanas, sensaciones que jamas llegaran a los años.
He sentido picos repentinos que se fueron con el ocaso. Recuerdos lejanos o sueños mitificados. Busco cartas lejanas de lo que alguna vez escribí hacia las personas que eran dueñas del sentimiento. Personas que laten aun en mi.
Viviendo como pasajero entre recuerdos ausentes que forman parte de un pasado incierto.

Al conocer nuevas cuestiones, me doy cuenta se la soledad que sentía. A pesar que en lo cotidiano no he encontrado un alma que entienda mis llantos, indirectamente se que no estoy totalmente solo y asilado. Fuera de mi y fuera de mi entorno hay personas que piensan, que trabajan en sus pensamientos y han logrado trasmitir aquello que yo siento. Puede que nunca las conozca, puede que siempre sienta el ahora. Siento que nunca llegare a creerlo. Pues pienso que no solo yo me miento.
Para el padre es brillante, para la madre es índigo, las amadas ignoran y de mi ser olvido las horas. Voy hacia el camino infinito, aquel del suicidio.

La soledad no ayuda, trabajo mejor con el corazón alimentado. He estado solo por demasiado tiempo, se lo que es la soledad, la oscuridad, entiendo de donde vienen los miedos, el dolor, por eso no los tengo. Pero el amor, el amor es algo que no se manejar, pues creyéndome experto siempre pierdo.