miércoles, 14 de octubre de 2015

Verdad


Los actos son los baluartes que están afianzados en las hebras de la realidad. Puentes construidos entre nosotros, plataformas que nos acercan o nos alejan a nuestro antojo, siempre y cuando no seamos torpes al comprender que forman parte de todos.

Son las fotografías de unas sonrisas pulcras, bien formadas. Un beso a la realidad, o un engaño a la verdad. Mil maneras de vivir y algunas para ser feliz. El trabajo nace de dentro, el fruto y la recompensa, ciclos que se nutren de nuestros encuentros. Distancia o tacto, mentiras o engaños, una verdad cimentada sobre mentiras reconocidas.

El paso por la vida que es solo una, una oportunidad y nada más. Una vida, un riesgo a ser vivida, una felicidad, un amor, un hogar en otro lugar. La aventura o la negación, decisiones de dolor, aciertos hermosos hacia la esperanza. El bienestar de uno es satisfacción para otros, un amor que floreces es una luz que ilumina un entorno, un espacio abierto, un cuarto cerrado. No importa donde se esconda la luz, siempre brillara si nace de fervor.

El debate personal sobre el bien y el mal, el objetivo final, el estado actual. Decisiones, de un hoy para el mañana, paciencias que no se encuentran y sentimientos originales mancillados por el ego antiguo como las penas. El martirio mártir de taparnos los ojos y gritar, alejarnos de todo aquello que el horror nos hace ver como el irretractable infinito.

Una vidas juntos sin pedir más que tu compañía que dará felicidad a mis días. Tan sencillo como tomar mi manos y seguir unidos por nuestro destino.