lunes, 24 de agosto de 2015

Amando a dados


Tendría que estar escribiendo una carta de amor, se aproxima el aniversario de dios. Única verdad, la única razón.

Un movimiento errático hace rodar unos cubos marcados. Allí esta ella en el extremo de la mesa, como las justicia, juzgando. Pero juega al juego que la sentencia. El azar que la dirige al caer.

Decisiones malintencionadas terminan por volcar todo el tiempo. La perdida sin recompensa. El victimario victima. Estupideces de una corta vida.

El más amado, el único amado, el despreciado, el ignorado. La inconsistencia de la suplica a la razón, ningún cuestionamiento al basto sentimiento. Miles de palabras, miles de horas dadas.

El amor, que hermoso sentimiento, que hermosa realidad trae cuando aparece en el alma errante. Trasmite, contagia. Medicinas indicadas para acabar con el, situaciones, gente enraizada.

Pasión por un alma. Una con cuerpo, con muchas capas. El neutro contacto, la luna llena en las alturas ilumina, pupila albina que mira. Más negro en luz que en oscuridad diurna.

No quieres ser mi primer acierto, no dejas ser tu ultimo error. Faceta del ego, el gran error.
Las vísperas antiguas en repetición. El mismo demonio riendo desamor.

Junio o Julio, dieciséis o diecisiete, las dos caras de Géminis.