martes, 25 de agosto de 2015

Totalidad


Si no llego a conocerte en esta vida, déjame sentir tu presencia, una mirada de tus ojos y mi vida sera tuya.
Todo lo que la vida da tiene opción a ser resuelto. Tenemos juventud en nuestros cuerpos, tenemos unos gratos cerebros, nos tenemos a nosotros como equipo, herramientas de un deseo. Vos por un lado, yo por otro, lejanos, pero tan cercanos en alma que no se podría distinguir la distancia. Dentro del mismo globo, del mismo planeta, y mientras existan las fronteras, existirá la necesidad emocional de atravesar cada una de ellas. Ninguna acción es demasiada, ninguna excusa demasiado buena con respecto a la acusación de no intentar aquello deseado. Tu mirada sos vos, y yo no puedo darle una respuestas negativa a aquellas luces que me miran.
Nuestra naturaleza, hoy, es un absurdo despertar para una sociedad aun dormida. La trama del amor, es parte el guion hacia la utopía. Una doctrinas de pautas no definidas en su totalidad, que nos llevan a experimentar los caminos adecuados para alcanzar aquello nunca producido. Somos un producto, impecable, puro. Somos aquello que fielmente odiamos, la honestidad de una nueva era. Busco la diferencia.

No antepongo el bienestar a los títulos. Pero una satisfacción meramente egocentrismo de ganar un objetivo, necesito, esa parte agria de mi ser como armas contra las barreras, ciertas de ellas que no puedo cortar con mis espadas férreas. Que la estrategia guie mi camino, que el motor sea siempre éste amo tuyo.
Tardare lo que tenga que tardar, pero nunca me estancare en el olvido de la promesa sagrada que alguna vez, y más de una vez pronuncie. Nos merecemos el conflicto, porque nacimos de aquel dialogo mudo entre la conciencia y la vida, el resultado, pero no el objeto persistente de su triste legado. El cambio, cambiar para poder optar por el cumplimento de los deseos, instintos, sentimientos. Un paso hacia nuestros sueños, hacia lo que entendemos como nuestro.