Lo noto cuando se fractura el
caparoncito y sale un dragoncito del huevito y el renacer tiene
sonrisas que confluyen en lagrimas.
En el nido siempre hay partes en las
que las cosas salen mal, y es en el nido donde se deben solucionar.
Di que sí cuando digo que no, y di que
no cuando diga sí, que la lluvia no apague lo que tenemos, y nos
ayude a no incendiar lo verdadero.
No llegues a pronunciarme y allí
estaré, pronunciando tu nombre. Saltando a lava o agua. A pétalos o
lana.
Donde los gusanos duermen te envuelves
en seda, me abrazas. En el lugar personal me cedes un lugar. Te echas
conmigo a la mar. Te echas conmigo en cualquier lugar.
Duerme la llama, tintinea en la
oscuridad, baila. Escribe con tinta dorada el cuento encantador de
magos y hadas. Nace un dragón, nuestro dragón. Es como nosotros,
mejor.
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